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Marketing por TUTE 2

A pedido del público … más de TUTE, el humorista gráfico que les conté en el envio anterior.

La frase con que se inicia “¿Todavía no tenes el I-Pad”?…es muy real. TUTE, con un criterio “crítico” enfundado en un sano humor, refleja muy bien el consumismo y el marketing. Para disfrutar.

Marketing por TUTE

TUTE es un humorista gráfico argentino, muy reconocido y que publica una tira todos los domingos en La Nación. Es joven, muy talentoso y es hijo de CALOI, otro legendario humorista (creador del famoso Clemente).  Pueden saber más de TUTE entrando en www.tutehumor.com.ar

Este chiste que se inicia con “No tengo Medias …” y termina con “Uh, no era por las Medias“, me pareció brillante, y lo quería compartir. Resume muy bien por donde gira el marketing de hoy: estimular el deseo en una sociedad donde sus necesidades básicas se encuentran más que satisfechas. Espero que lo disfruten como lo disfrute yo.

¿A quién le importa?

Las empresas al estructurar sus servicios, definen una serie de pautas que le son fundamentales y pilares de la propia prestación. Se determinan procesos, se dividen tareas, se concilian métricas y hasta se siguen protocolos específicos (como las normas ISO) que certifican la validez de todo lo actuado. Todo este trabajo e inversión, con vistas a cumplir con lo prometido y brindar a sus clientes un servicio diferencial. ¿Estamos de acuerdo con esta forma de actuar? POR SUPUESTO. ¿Alcanza?  NO

¿Por qué no? Porque con esta forma de proceder (que de paso, muy ausente aún en muchas empresas), lo que definimos son las pautas estándar de una atención prolija y suficiente. Pero el devenir de un negocio requiere mucho más que eso. No todo se puede encapsular (cuál mostrador de McDonalds) en 2 o 3 variables de servicio dentro de un par de combos cerrados. La cantidad de interacciones, la intensidad de las mismas y la inmensidad de detalles que nutren el servicio son tales que querer estandarizar todo en procesos y normas suena a una utopía griega.

Dicho esto, y lo que complejiza más las cosas, es que los clientes son especialmente agudos al detectar este tipo de falencias. Son mínimas a veces (otras no), pero son lo suficientemente presentes para molestar.  Ejemplos son el teléfono que no se contesta rápido cuando llamamos a servicio al cliente, el desorden en un local cuando entramos a comprar ropa, las cajas vacías al mediodía en un banco lleno de gente, la cortina de baño que le falta una arandela en un hotel supuestamente de nivel, el personal que no responde a nuestra consulta aún insistiendo, el reclamo realizado ante un call center sin respuesta (a pesar de nuestra ansiedad), la falta de interlocutores válidos ante un pedido urgente…etc.  Pero hay otros ejemplos en principio menores: por ejemplo, un letrero roto, una pared manchada o falta de sillas suficientes para una sala de espera. En estos ejemplos, parece que NADIE se preocupa porque es imposible estandarizar hasta ese detalle y NADIE se toma el trabajo de mirar las cosas desde los ojos del que importa: el cliente y tratar de resolverlo.

Todos estos ejemplos nos llevan entonces hacia otra categoría, a un nivel superior de la mera definición de estándares o indicadores de servicio: el cuidado real por el cliente y su experiencia.  Este cuidado al que hago referencia, es el extra que debemos hacer, el esfuerzo no escrito por satisfacer muchas veces lo no contemplado previamente.

Lo crítico de esto, que a pesar de su descuido, tiene mucho sentido para los clientes.  Lo increíble de todo esto, que este cuidado superior y extra, es muchas veces lo que termina haciendo la diferencia de cara al cliente. Lo demás, pasa a ser superfluo. Es este sentimiento de “dan más de lo que se les pide” es la coronación de un servicio básico con el agregado de un extra valioso más allá de lo normado.  

El unipersonal lo sabe y lo hace, cuando brinda su celular a su cliente y le dice  “llámame cuantas veces haga falta”. Pero es más difícil estructurarlo cuando hablamos de empresas grandes y complejas; sin embargo, es necesariamente competitivo el desarrollarlo.

Ahora bien, ¿cómo lograr que este cuidado extra se arraigue y se hago norma en una organización? Es un cocktail de varios ingredientes. Esto abre un capítulo de excusas: que es un tema cultural, que la gente no tiene tiempo, que no damos abasto, que hace falta capacitación, etc. Todo muy cierto, pero son excusas. Si me permiten compartir una pista, el ejemplo empieza por casa y por los máximos responsables. Así como en los hogares los chicos aprenden de los padres, en las empresas grandes los empleados aprenden de los jefes, empezando por el Número 1. El gerente general debe ser el “paladín” del cuidado extra sobre el servicio y un obsesivo por los detalles.  Es el máximo responsable, quien a través del ejemplo propio (y la valorización genuina y sincera de quienes hacen lo mismo que él), el que debe inculcar ese cuidado extra sobre lo que hacemos y brindamos.

Puede ser frustrante al principio y con un eco mínimo inicial, pero gratificante en el mediano plazo si somos lo necesariamente constantes. Los clientes lo van a agradecer.

Revalorizando a Michael Porter

Michael Porter es uno de los grande gurúes de estrategia y sus libros se han vendido por millones. Es un clásico de la literatura de los negocios y un referente obligado para aquél que se inicia en el tema de management. Sin embargo, existen algunos preconceptos sobre sus ideas: que han pasado de moda, que ahora no aplican o sobre que es “material viejo”.

Con esto en mente, en diciembre del año pasado se publicó el libro Understanding Michael Porter: The Essential Guide to Competition and Strategy. Fue escrito por la profesora de Harvard Joan Magretta con el objetivo de “darle una nueva vuelta” a sus conceptos y entender su actualidad.

A continuación les transcribo un resumen de los principales conceptos a rescatar del nuevo libro. Los transcribo en inglés porque las traducciones son odiosas y creo que es la mejor forma de entenderlos.

  1. Competitive advantage is not about beating rivals; it///’s about creating unique value for customers. If you have a competitive advantage, it will show up on your P&L.
  2. No strategy is meaningful unless it makes clear what the organization will not do. Making trade-offs is the linchpin that makes competitive advantage possible and sustainable.
  3. There is no honor in size or growth if those are profit-less. Competition is about profits, not market share.
  4. Don///’t overestimate or underestimate the importance of good execution. It///’s unlikely to be a source of a sustainable advantage, but without it even the most brilliant strategy will fail to produce superior performance.
  5. Good strategies depend on many choices, not one, and on the connections among them. A core competence alone will rarely produce a sustainable competitive advantage.
  6. Flexibility in the face of uncertainty may sound like a good idea, but it means that your organization will never stand for anything or become good at anything. Too much change can be just as disastrous for strategy as too little.
  7. Committing to a strategy does not require heroic predictions about the future. Making that commitment actually improves your ability to innovate and to adapt to turbulence.
  8. Competing to be the best is an intuitive but self-destructive approach to competition.
  9. A distinctive value proposition is essential for strategy. But strategy is more than marketing. If your value proposition doesn///’t require a specifically tailored value chain to deliver it, it will have no strategic relevance.
  10. Don///’t feel you have to “delight” every possible customer out there. The sign of a good strategy is that it deliberately makes some customers unhappy.

Luego de leerlos, ¿les parecen anticuados? Sin duda, Porter y sus conceptos siguen teniendo la vigencia de siempre. En mi opinión, rescato efusivamente los puntos 3, 6, 9 y 10.  Gracias, Michael Porter.

Los 10 pecados capitales del Marketing

¿Quién no conoce a Phiilp Kotler? Está bueno algunas veces ir a las fuentes y escuchar a los que saben. Acá les dejo un pequeño resumen de los 10 pecados del marketing según el afamado Philip. 

PECADO 1-La compañía no está suficientemente orientada al mercado y dirigida a los consumidores: algunas empresas sólo definen su mercado como “mujeres de 20 a 40 años”, cuando el marketing moderno requiere de estudios más profundos. Es fundamental realizar estudios de mercado cada año y mantenerse informado sobre cómo se segmentan los consumidores.

PECADO 2-La empresa no entiende del todo a sus clientes potenciales: según el experto, estas empresas realizaron su último estudio de mercado hace años, por lo tanto no conocen a sus compradores. Esto genera muchas quejas de sus consumidores, devoluciones y que la competencia venda mejor.

PECADO 3- La empresa necesita definir mejor la competencia y controlarla: siempre se debe estar al tanto de lo que pasa en la industria propia, conocer a los competidores, lejanos y cercanos, y estar atentos a lo que hacen.

PECADO 4-El negocio no ha gestionado adecuadamente su relación con las partes interesadas: esto se refiere a una mala comunicación entre empleados, proveedores, distribuidores e inversores. Un cambio mal llevado, en cualquiera de las partes, se reflejará en la actitud de los demás.

PECADO 5- A la empresa no se le da bien encontrar nuevas oportunidades: esto sucede cuando la compañía no introduce nuevos productos al mercado en varios años o cuando los productos que se lanzaron no fueron exitosos. Se debe buscar la manera de cambiar el pensamiento del negocio para generar ideas innovadoras.

PECADO 6-Las políticas de productos y servicios de la empresa necesitan un ajuste: los planes de marketing están repletos de promociones, presupuestos, cifras, etcétera, pero carecen de un objetivo real y de un plan estratégico para conseguirlo.

PECADO 7- La construcción de marca y las comunicaciones del negocio son deficientes: esto quiere decir que la política de producción de la mercancía no se ajusta a la realidad, porque la compañía ofrece demasiados servicios gratuitos que el cliente no valora y porque otros de los servicios tienen un costo exagerado.

PECADO 8- La construcción de marca y las comunicaciones de la empresa son deficientes: a pesar de todo el presupuesto invertido en publicidad, aún hay muchos de clientes potenciales que no conocen la marca. Un error fatal es asignarle cada año el mismo presupuesto al departamento de marketing.

PECADO 9- La empresa no está bien organizada para llevar a cabo un marketing eficaz: esto pasa cuando el departamento de marketing no conoce las funciones que le son propias, como investigaciones de mercado, publicidad, promoción y administración de ventas, así como las tendencias de consumo.

PECADO 10-La empresa no ha sacado el máximo partido a la tecnología: esto se da porque no se usa internet y las nuevas plataformas que ofrece, como redes sociales, o porque el sistema de ventas es anticuado y ya no responde a las necesidades del consumidor moderno.

¿Alguna empresa puede aducir que no ha pecado o peca siguiendo este listado de Kotler? Para pensar.

El crucero Gay que no llegó a buen puerto

La literatura del marketing siempre habla y pontifica los casos de éxito. ¿Es tan fácil ser exitoso? La verdad que NO. Por eso, me llamó mucho la atención la nota publicada en La Nación que transcribo a continuación. ¿Una suerte de sincericidio? Tal vez: pero lo que rescato es que más allá de la franqueza, es muy interesante leer este caso de NO éxito.

Destaco entonces la nota porque detalla una serie de errores que hacen al marketing estratégico y describen con muy buen detalle qué cosas hay que tener en cuenta. Temas como segmentación, oferta, precio, canales, etc., todo en esta nota está muy bien contado y detallado.  Siempre digo que los casos de errores son los más útiles para entender y aprender. Este caso lo refleja.

Ah! Si alguien aún se pregunta que es tener una estrategia de marketing y si hace falta tenerla o no … lean este caso y les quedará más que claro!

El crucero Gay que no llego a buen puerto

El primer crucero de temática gay ideado por dos agencias de turismo argentinas fue un fracaso. De hecho, de las más de 2000 plazas disponibles sólo se compraron 200. A raíz de ello, las dos organizadoras del proyecto Ego, Thesys y Eurovips, se vieron obligados a suspender el viaje cuya fecha de partida era el 12 de diciembre.

“Fue un fracaso comercial”, admitió a La Nacion José María Jaroslavsky, director de Thesys. Entre las dos agencias involucradas habían invertido más de un millón de dólares y pensaban convertirse en pioneras de un segmento inexplorado en América latina. El barco finalmente partió el día previsto, con la diferencia de que los organizadores abrieron la venta de pasajes al público en general, bajaron los precios a la mitad y los divertimentos planeados originalmente se excluyeron.

Entre las razones que explican el fracaso, dice Pablo De Lucca, de la consultora Gnetwork360, que participó en la organización del proyecto, está la “equivocada” política de precios. Pasa que un boleto para el Ego costaba arriba de los 1000 dólares, mientras que para un crucero regular es de alrededor de 400.

Los propios clientes dieron cuenta del problema. “En una encuesta que realizamos sobre una porción de personas que mostraron interés por comprar un pasaje, la gran mayoría alegó que el precio no correspondía con el de un crucero heterosexual”, subraya De Lucca.

Otro paso equivocado fue el haber hecho foco del marketing sólo en los jóvenes y adultos de 25 a 35 años, en una maniobra que dejó afuera a gran parte de la comunidad de gays y lesbianas. “En Estados Unidos gran parte de los cruceros gay se vende a personas mayores de 40 años”, apunta De Lucca.

Por último, la necesidad de respetar la cadena tradicional de venta a través de agencias locales causó problemas. Ocurre que un potencial cliente de Chivilcoy estaba obligado a comprar el paquete en la agencia de su pueblo y quizá prefería hacerlo de forma más “confidencial”.

El método fue a contramano del que se utiliza en Estados Unidos o Europa, donde casi el total de ventas se hace online o a través de las agencias que regentean el buque. “No es bueno que te obliguen a salir del closet con cada pregunta”, señaló De Lucca.

A raíz del intento frustrado, el negocio de los cruceros gay quedó sin dueño. “Las firmas brasileñas lo van a aprovechar”, alerta De Lucca.

Una nueva forma de arte

Cuando se crea tecnología se tiene en mente esencialmente la comunicación: buscando generar relaciones, intercambios y conexiones en formas más efectivas, ágiles y sobretodo fáciles y accesibles.

Pero también se puede crear arte. Jorge Colombo es un ejemplo de ello. Pintor de profesión, este portugués de nacimiento se ha destacado por sus trabajos realizados… con el software “Brushes” de Ia tableta IPAD. 

Esta nueva técnica se llama FINGER PAINTINGS. Con esta técnica ha creado tapas de revistas, libros y ha realizado distintas exposiciones. El lienzo de sus creaciones es un artilugio tecnológico.

Una nueva rama del arte, sin duda.

 

Google, mi médico

Sabemos muy bien que la tecnología ha ido cambiando algunos hábitos de la gente, pero a veces perdemos conciencia de QUE Tanto cambio ha generado.  Algunos ejemplos son la mejor pauta. Y si no, que mejor muestra que el uso de Google para sacarnos “ dudas”. Los buscadors se han erigido como “cunas del saber“. 

Este nuevo hábito no sólo se limita a buscar nuevos productos o comparar propuestas  o localizar ofertas o distintos lugares de consumo. Su uso ha trascendido fronteras, que llegan hasta áreas impensadas o tal vez algo “peligrosas”.

Una de esas áreas es el uso de Google para consultar temas médicos. Un estudio reciente en Alemania realizado por Ogilvy indica que Google es el primer lugar de referencia de información en temas de salud entre las personas de 18 a 25 años. Es consultada en un 94% por sobre otras fuentes de información, como lo son un médico, un amigo o sus padres.

Al ver estos datos, no me sorprendió: debo confesar que como padre he caído en la tentación de Google para consultar temas relacionados con mis hijos, incluso de salud. La primera reacción es: ¿qué tan seguro es Internet como medio de consulta de estos temas críticos? ¿Podemos basar una acción en función de la información reinante? Seguramente, NO.  Google no es un doctor, aunque contenga información útil y abundante. Google NO reemplaza a la acción de ningún médico.  Puede orientarnos primariamente, pero no debe ser motivo de diagnóstico o de soluciones o de ninguna acción médica. El peligro es enorme si nos “automedicamos” gracias a este doctor virtual. Tenemos que ser responsables, chequear fuentes confiables, y no dejarnos llevar por comentarios sin fundamentos profesionales validados.

Pero existe un pormenor aún más profundo. Aún sabiendo sus riesgos… ¡es el lugar de consulta! Aún sabiendo que NO es la opción o sus peligros, ¡igualmente se la usa para esto!. ¿Por qué? Seguramente, por su comodidad y familiaridad. Google es cómodo, porque nos da respuestas inmediatas y en segundos. Y nos es familiar, dado que lo usamos regularmente. Es mucho más fácil consultar al Dr. Google, que tomarnos el trabajo de llamar al médico o concurrir a una guardia médica.

¿Entonces?  Más allá de nuestros propios hábitos, existe una responsabilidad mayor que Internet tiene que empezar a asumir, especialmente en los jóvenes. Así como en wikipedia.org, el contenido es libre pero supervisado  por voluntarios, para ciertos temas como el de la salud, Internet no puede ser un libro abierto y sin control. ¿Quién es responsable si, siguiendo  un consejo de Internet, un ser querido se ve perjudicado en su salud?

En síntesis, Google no es un médico. Como usuarios, debemos saber que es sólo un lugar de referencia más. Pero como transmisores de contenido, los buscadores deben trabajar para darle la mayor autenticidad y responsabilidad posible a lo que se publica, especialmente en estos temas críticos. Me consta que trabajan en este rumbo, pero todavía falta mucho por recorrer.

Mis clientes en Internet

Un gran postulado moderno del marketing actual indica que hay que escuchar y saber qué  es lo que dicen los clientes (“mis clientes”) sobre mi empresa y mis productos en Internet.

No sólo para conocer quejas o reclamos; sino para poder anticiparse y generar satisfacción antes que los problemas pasen.

Con esto en mente … ¿qué está haciendo sobre este tema?

La empresa Gatorade tiene su propia respuesta para este tema. Sino, fijense este video ilustrativo.

Para reflexionar y tomar nota.

Llamar la atencion (Así NO)

En la nota anterior remarcábamos como la atención es un bien escaso, y como la creatividad es un camino posible para despertar el interés de los consumidores.

Pero el llamar la atención tiene sus límites. Veamos este ejemplo: 

RENAULT USADOS.                 Paula Hernández, 40 años, 2 veces divorciada.

Así, NO se debe llamar la atención. Podemos discutir si este aviso es creativo o no, pero en definitiva, es una discusión que NO importa. La atención se debe llamar, y lograr, pero con algunos criterios que no se deben trasponer. El respeto, ante todo.

No todo vale, con tal de llamar la atención.  Y es el consumidor el que finalmente juzga (y te juzga) si esto no se respeta.

Llamar la atención (Así SI)

Se habla mucho que las fórmulas probadas antaño en el marketing, hoy comienzan a ser poco útiles o no suficientes. Es que hoy por hoy, con comprar espacios en los medios o realizar inversiones en comunicación NO basta para que nuestros consumidores nos escuchen o compren. 

Es que, ante la cantidad de opciones e información reinante, el consumidor vive abrumado con ofertas y referencias. De esta forma, el gran desafío de las empresas es lograr “captar” la atención de sus consumidores. Atención es un bien escaso. Lograr que ante la innumerable cantidad de opciones reinantes, el consumidor pose sus ojos ante nuestras propuestas suena a milagroso.

Captar la atención es un ejercicio complejo. Requiere ante todo, ponerse EN SERIO en el lugar del consumidor, y hacerse una pregunta ácida: “Si yo fuera un cliente, ¿le prestaría atención  a lo que me están comunicando?”. Si la respuesta es un vago “tal vez”, estamos en problemas.

Ante esta escasez de atención, surge la creatividad como una potencial llave salvadora. La creatividad se erige como un recurso válido para lograr que los consumidores nos presten atención. Es el trabajo del creativo el que logra sacar al consumidor de su estado “alfa” y que nos preste un rato de su carísimo tiempo.

Fácil de decir, pero no tanto de lograr. Todas las agencias de publicidad del mundo “venden” esta creatividad, pero no todos lo logran. NO, porque no lo intenten, sino porque no es nada fácil.  Recuerden: la compra de un espacio de un medio no te asegura atención, el contenido y su creatividad es la llave.

La creatividad bien entendida, puede o no ser cara. Y si no, vean este ejemplo que muy bien lo ejemplifica.

Cambios dramáticos en el marketing

Se habla y escribe mucho sobre los cambios en el marketing, pero pocos lo han ilustrado tan bien como la agencia Scholz & Friends de Alemania.

Además, de ser simpático y estar muy bien hecho, sintetiza en forma divertida los cambios que ha atravesado la actividad. Un video digno de verse.

 

La elección apresurada

Esta nota la escribí junto a mi mujer Lic. en Psicología Magalí Levinton y salió publicada el 3 de enero de 2012 en Infobae.

“El hombre, como espíritu, no es algo inmediato, sino esencialmente un ser que ha vuelto sobre sí mismo. Este movimiento de mediación es un rasgo esencial del espíritu. Su actividad consiste en superar la inmediatez, en negar ésta y, por consiguiente, en volver sobre sí mismo. Es, por tanto el hombre, aquello que él se hace, mediante su actividad” (Hegel)

Uno de los grandes derechos civiles es la posibilidad de elección. En la historia, la humanidad misma ha librado batallas para poder lograr este derecho y hacerlo lo más universal y democrático posible. El ciudadano moderno tiene hoy una capacidad única de poder discernir, contar con información precisa, elegir opciones, hacer valer sus intenciones y buscar con tiempo y prudencia el mejor camino para una elección propia y personal.

Sin embargo, y a contramano de este devenir diríamos histórico, nos encontramos con que a veces este derecho no se ejerce. Es cuando la elección, en vez de ser propia y estudiada, parecería ser ajena y apresurada. Lo que podría ser un derecho se convierte en un favor o facilismo, donde la elección no es una decisión sino una respuesta o correspondencia hacia otro, hacia alguna causa, anuncio imperativo o sugestivo. Estas situaciones se dan en múltiples ámbitos: en el laboral, cuando un compañero o jefe impone una condición sin que haya planteos; en el grupo de amigos, donde la elección es privada y discrecional de uno de sus miembros y el resto acata por miedo o conformismo; en las parejas, cuando uno impone porque sí una elección mientras que el otro obedece sin estar muy convencido; en la relación ídolos-seguidores, donde el idolatrado comparte sus caprichos y sus referentes acatan en forma silenciosa y complaciente; y también en los negocios, cuando una marca impone reglas y tendencias, y el consumidor acepta por empatía pero no por propio discernimiento.

Por un lado tenemos así los que impulsan su idea y elección, aquellos que utilizan el narcisismo como bandera, por simple gusto o porque seguramente éste ha sido el lugar que les ha tocado y ocupan en la vida, en el grupo social. Son los que piensan, sienten por sí y para sí mismos, ciegos a su entorno y a la necesidad del otro, aunque fieles a sus objetivos e ideales personales.

Por el otro lado están los “obedientes”, los que han pagado un precio por su elección dócil, fácil, “apresurada”, los que han privilegiado la decisión del otro sobre la suya, los que han sucumbido al pedido ajeno sin atender su propia escucha. Son los que responden en forma casi mecánica o automática a los dichos o pedidos de los primeros; los que eligen apresuradamente, sin ser conscientes de por qué lo hacen.

Nos encontramos así con una polaridad evidente. Para algunos “prescindible”, para otros “im-prescindible”. Las dos caras de una misma moneda, donde siempre es necesario el semejante, el otro. Porque el otro siempre está en nuestro camino. El problema es la dificultad que se presenta para algunos esta ligazón al otro, que no les permite tomar decisiones propias. Sólo existe la obligación o el deber de velar por “la elección ajena”.

¿Cuándo y por qué se da esta “cesión” de la elección? ¿Qué llevaría a una persona a relegarse a sí misma y elegir apresuradamente?

Existen algunos determinismos que no se pueden elegir: como los orígenes, la familia o el lugar de pertenencia. Pero hay otras cuestiones que tienen que ver con la propia libertad de elección. La dificultad radicaría entonces en la imposibilidad de “parar”, de no poder escucharse, de no poder imponer su decisión porque están demasiado acostumbrados a la voz ajena, donde es el otro el que invade e impone. Esto último no significaría que el otro tiene mala intención, no me quiere, no me respeta o me hace daño. No es una lucha contra alguien externo, de carne y hueso, esto iría un poco más allá; tampoco se resuelve terminando con el otro que nos limita y hace escollo. Porque, ¿Acaso es el otro el que no me deja elegir? ¿O es uno mismo el que elige no elegir? Es el propio sujeto quien tiene la posibilidad y el deber de interrogarse que es lo que le está sucediendo y por qué.

De esta manera, imponer la propia elección tiene que ver con tener la posibilidad de interrogarnos sobre lo que verdaderamente deseamos, y tener la valentía para sacarlo, hacerlo re-lucir.

¡Bienvenida la libre elección no apresurada! Quien elige apresuradamente puede continuar por ese camino determinado, ajeno, o bien puede hacerse cargo y tomar las riendas de su propio rumbo. Elegir su propio destino y no el impuesto. Un recorrido nada fácil y doloroso, pero valioso de transitar.

Los 5 motores

Recientemente, la empresa Unilever ha compartido lo que a su criterio son los 5 motores del marketing: un conjunto de principios a considerar al tratar con los consumidores.

Los comparto dado que me parecieron muy lúcidos y de interesante guía a la hora de actuar.

Los 5 motores propuestos son:

  • Que sea Comprensible: a veces la gente no entiende por qué debería comportarse de una forma determinada. Este motor consiste en fomentar la aceptación y la cautela.
  • Que sea Fácil: la gente es más propensa a actuar si se lo ponemos fácil pero sin que implique un esfuerzo extra. Este motor establece conveniencia y confianza.
  • Que sea Deseable: es necesario entender qué le gusta a la gente pensar sobre sí mismos y cómo les gusta que los demás piensen de ellos. Este motor trata de uno mismo y de la sociedad.
  • Que Recompense: los consumidores necesitan ser compensados con beneficios tangibles que realmente le interesen.
  • Que se haga Hábito: una vez que los consumidores hayan cambiado, es importante desarrollar una estrategia para ayudar a que ese cambio se mantenga en el tiempo. Este motor trata de reforzar y recordar.

Una muy interesante recopilación de aspectos tal vez obvios pero que demasiado seguido se olvidan.

Emocionalidad y tragedia

Se escribe (y mucho) de la emocionalidad como factor importante al momento de comunicarse y vincularse con las distintas audiencias (especialmente con los consumidores). Dentro de las emociones, el humor ha sido uno de los pilares más usados, pero también se ha recurrido a otros recursos ligados al drama o los afectos.

Pero, poco se ha incursionado en otras emociones más extremos y jugadas, de dramatismo puro, ligadas a la tragedia, que son emociones más difíciles de procesar y aceptar. Les comparto un ejemplo de publicidad que comunica desde la emoción, pero desde un lado distinto. Destacable por su factura pero NO RECOMENDABLE para personas sensibles. Es de un videojuegos sobre zombies (contado de atrás hacia adelante).

Los mejores virales del año 2011

Para despedir al año, les comparto los mejores virales del 2011.  Una publicidad de un juego de video, de una marca de celulares y de una marca de gaseosas, son ejemplos de piezas muy bien hechas y exitosas.

¡Feliz Año!

El lado oscuro de la fuerza

Este año ha habido muy buenas publicidades, para disfrutar en el mundo viral de Internet, pero una de las más destacadas (con aplicaciones en varios países) ha sido la de Volkswagen. Tomó 2 temas interesantes: los niños y la Guerra de las Galaxias, y los combinó en forma inteligente, destacándose por su simpleza, gracia y efectividad.

Las cifras hablan por sí solas: 44 millones de visitas en YouTube, y 6.800 millones de impresiones en todo el mundo, con una única ejecución en Estados Unidos (en el Super Bowl).

Pero, también, … vean esta OTRA versión … Como una segunda parte del aviso … pero en manos de GreenPeace.

Existe toda una movida (se puede visitar la página www.vwdarkside.com ) donde se pone al descubierto una supuesta cara distinta de la empresa (su “lado oscuro”) y se invita a unirse a la rebelión. Con casi medio millón de “rebeldes”, la iniciativa ha tenido cierta repercusión y el corto ha sido premiado en el festival de Berlín en la categoría de cortos virales (Ver: www.viralvideoaward.com/)

¿Interesante, no? La publicidad no está ajena a la crítica real y a la opinión de los consumidores: en este caso, apalancando creatividad con más creatividad.

Feliz Navidad con realidad aumentada

A los que les encanta la tecnología y la aplicación de la realidad aumentada en el marketing, les comparto esta campaña navideña de Starbucks. Sólo hace falta bajarse una aplicación para el celular y apuntar a una de las tazas de café, para poder disfrutar de una linda experiencia navideña.

Vean el video para creerlo.

 

El regalo de Navidad que no recibirás

 

Es época de Fiestas y de consumo, y donde las marcas y las empresas utilizan más que nunca los medios publicitarios para acercar sus propuestas a los clientes y de paso lograr conexión y transmitir mensajes.  Esto no es nuevo, históricamente las empresas han comunicado fuertemente en esta época, apelando a recursos válidos como Papa Noel, arbolito de Navidad, etc.

Ahora bien, repasando avisos de otras épocas, seguramente esta publicidad NO tendría lugar en el mundo comunicacional de hoy. ¡Cuánto ha cambiado el mundo publicitario! ¡Qué increíble que se permitieran mensajes que hoy serían catalogados de peligrosos, nocivos o discriminadores!

La comunicación publicitaria ha evolucionado, no cabe duda, y en este camino hay por supuesto cosas criticables pero otras plausibles y que demuestran una maduración como sociedad. Bienvenidas.

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