¿No creen como yo …que Whatsapp ha cambiado nuestras vidas?
Es increíble lo que ha sucedido con la gente gracias a esta aplicación. Lo primero y hay que decirlo es que es altamente adictiva. Es difícil no engancharse, no estar conectado, no saber que ha pasado, que me dicen y porque.
Pero también, como dicen las encuestas, ha llenado minutos y horas de nuestro tiempo. Por un lado, ha acercado tremendamente las relaciones. Ejemplo: todos tenemos gente amiga o conocida que vive afuera. Antes nos contactábamos cada tanto, hablábamos en forma periódica: en cambio, ahora es muy fácil el contacto, el intercambio de información. Me comunicó mucho más seguido: que bueno! ¿Para qué?
Por otro lado, las ha alejado, también. Es una imagen repetida, ver parejas, familias, juntas, pero cada una extraída en su whatsapp en su comunidad, cerca de otros, lejos de los cercanos.
Pero lejos o cerca, las ha potenciado. Y las ha dirigido a un único lugar. LA VIDA nuestra corre y descorre en Whatsapp. Desde familiar, sentimental, parental, fraternal. Todo, hasta comercial. Se puede alquilar un departamento, pedir una cotización, solicitar un contacto o establecer una cita por Whatsapp. La vida misma.
Con un efecto en al marketing Demoledor. Nuestro tiempo es limitado, y esos segundos escasos, ahora tenemos al whatsapp como gran usurpador de espacios. NADA compite contra esto, NADA. No hay contenido, publicidad, o propuesta más interesante que el mensaje grupal de tus mejores amigos. NADA. ¿Es fácil entrar para las marcas? Casi imposible, algunos intentos aislados, pero nada concreto y replicable. Sigue siendo un espacio casi vedado para las marcas, salvo algún video viral que logre ingresar. Difícil.
Estamos entonces a un cambio social, cultural, relacional, IMPRESIONANTE. Testigos vivos porque lo estamos viviendo hoy ahora, no lo estamos leyendo ni lo estamos previendo. Pasa hoy. Las consecuencias ya se ven algunas hoy, se seguirán viendo a futuro.
¿Definitivo? Para nada, hace 3 años nadie sabía que era Whatsapp. Pero seguro, y sin temor al error, el inicio de un cambio impresionante. Como todo cambio inquietante y riesgoso.